viernes, 1 de agosto de 2008

La Comisionada y la medalla


Dice un buen amigo mío que, tan malo dejar de escribir en un blog durante mucho tiempo ( yo he tenido abandonado este más de un mes), como escribir dos post seguidos en el mismo día. Me temo que hoy voy a romper esas normas no escritas e incluso una tercera que sería la de no polemizar entre blogs de la red.


Que le vamos a hacer, soy un poco rebelde y además tengo cierta ansiedad de comunicarme con vosotros después de las vacaciones. Lo cierto es que este post tiene que ver con unas afirmaciones realizadas en otro blog sobre unas declaraciones mías de estos días en las que me oponía a que la Ciudad de Oviedo otorgase su primera medalla de bronce de la historia a una mal llamada Comisión de la Memoria Histórica. Una comisionada, parece que se sintió dolida y vierte una serie de afirmaciones que os resumo, acompañadas de mi respuesta a aquellos que no tengais tiempo de entreteneros con los enlaces:


1. Afirma que yo dije que desconocía cual era el trabajo de la Comisión. Falso. Lo conozco muy bien, entre otras cosas porque me he entretenido en leer los 33 folios que componen las actas de las ocho reuniones que celebraron ( como es mi obligación por otro lado), lo que dije es que desconocía cual era "el valor singular" de ese trabajo requerido para obtener un reconocimiento de la ciudad por tal mérito. Por otro lado afirma que los comisionados han trabajado mucho y han tenido sesudas reuniones ( un día hablamos de lo sesudas que fueron), pero yo ni siquiera lo dudo. ¿ Concedemos una medalla a todos aquellos que trabajan mucho y voluntariamente en esta ciudad?, pues que vayan fabricándolas.

2. Se queja la Comisionada que yo haya calificado a los miembros de la Comisión como "amigos del Alcalde" y dice que ella nunca se atrevería a decir que un Concejal lo es por ser amigo/a, primo o hermano de alguien. Bien, veamos: quiero recordaros que la citada Comisión se crea para interpretar una Ley ( cosa que ni siquiera es necesaria, las leyes se cumplen, no se interpretan) y que pese a nuestro criterio y al de mucha otra gente, el Alcalde, sin contar con nadie ni encomendarse a nadie, decide nombrar a una serie de gente para tan "alto cometido" ( desconocemos con que criterios y con que objeto y atribuciones). Tales ciudadanos aceptan ( algunos no aceptaron, me consta) y ahora,además quiere darles una medalla. No tengo idea de si son amigos o enemigos, pero desde luego el único mérito es la voluntad del Alcalde y por eso la palabra " amigos" sale en mis declaraciones entrecomillada, porque los periodistas entendieron perfectamente a lo que me refería, la comisionada parace que no. Por otro lado, le recuerdo a la Comisionada que yo no soy Concejal por voluntad del Alcalde, sino como consecuencia de dos votaciones. Una, la de mi partido y otra la de la ciudadanía. Al margen de eso, tengo amigos, primos y hermanos.

3.Dice la Comisionada que soy un ejemplo de ignorancia y desconozco la memoria histórica y cita para ello, el hecho de que yo mencione que debería haberse suprimido el nombre del General Yague en el Callejero, cuando esa calle fue concedida antes de comenzar la guerra civil. Pues bien, le diré a la señora Comisionada, que el artículo 15 de la Ley de la Memoria Histórica habla con claridad de la retirada de insignias, placas y símbolos, de exaltación personal y colectiva de la sublevación militar, de la Guerra Civil y de la represión de la dictadura, ¿ no entra en esos parámetros un personaje que mandó fusilar a 4.000 personas en plena guerra civil?. La cuestión, señora Comisionada, no es cuando le hayan dado la calle, sino la participación o no en determinados hechos y creo que sinceramente es más lamentable que una Comsionada haga una interpretación de la Ley en esos términos a que un Concejal conozca o no la ciutada ley ( que por cierto conozco desde el mismo momento en que era un borrador). Por otro lado y si mi modesta pero libre opinión no fuera suficiente, le diré que tanto la Fundación de investigación histórica José Barreiro como los catedráticos de historia que confeccionaron el informe sobre "las pervicencias franquistas en el callejero de Oviedo" para el Grupo Asamblea de Ciudadanos de por la Izquierda, abogan, "naturalmente" por la retirada de esa calle y entienden, " por supuesto" que entra de lleno en la citada Ley. Para los comisionados, al parecer no.

Finaliza la Comisionada, con una importante declaración:" El trabajo de los Comisionados fue voluntario y no cobramos dietas" y se pregunta si el señor Concejal las cobra.

Como parece interesarle mucho este asunto, le diré que no, que este señor Concejal no cobra dietas, cobra un salario del municipio que ha sido decidido por la Corporación en Pleno y por la ciudadanía con sus votos ( algo bastante fácil de saber, por cierto, puesto que además de ser publico, ha sido recientemente publicado con motivo de la declaración pública de bienes y actividades de los Concejales del Ayuntamiento de Oviedo. Cuando la ciudadanía de Oviedo y/o la Corporación lo estime conveniente dejaré de cobrarlo ( así es la democracia) y entonces continuaré haciendo el resto de trabajos no remunerados que por convicción y desde hace muchísimos años lleva uno haciendo sin que se crea mercedor de una medalla ni necesitado de una llamada de un Alcalde.


PD: De momento, lo dejo ahí, aunque dada la afición escritora y la desocupación de algunos de los comisionados, me temo que seguiremos escribiendo sobre ésto.


2 comentarios:

factoria7gritos dijo...

Me parece muy adecuada la denuncia que hiciste en su momento. Una medalla, por favor ¡qué disparate! :-(

No sé si me lo publicará y si habré hecho lo correcto (a veces el olvido es el mayor de los desprecios), pero le he dejado un comentario en el blog de esta persona que formó parte de la comisión. Hay que ver como la defiende, debe de pensar que la medalla es olímpica.

Desde luego al alcalde le ha ido bien llamándola para la comisión desde entonces ya ha pedido la dimisión de Zapatero y la entrada en prisión de Solbes. Una medalla es poco pensará ahora Gabino.

Sergio dijo...

Me congratulo de que un buen amigo de Mánuel, que es una persona a la que yo quiero mucho, pero con la que siempre estoy discutiendo ( "¿ amores reñidos son los más queridos?", con permiso de su Sra. Esposa y habida cuenta además de la condición de heterosexuales tanto de Mánuel como de este humilde servidor), le haya dicho exactamente lo mismo que le he dicho yo.

Eso sí, me congratulo mucho menos de que se pretenda dar una medalla de bronce, o aunque fuera de barro cocido, que al precio que se están poniendo los metales no están las finanzas del Ayuntamiento de Oviedo para bromas a personas como Doña Susana Pérez-Alonso no sé qué otro apellido compuesto que ni recuerdo ni me interesa recordar, porque, como bien dice Mánuel, hay personas en la Comisión que trabajó en el tema de la adaptación del callejero de Oviedo a la legislación vigente que se merecen medallas hasta de oro por su trayectoria...

No es para mí el caso de la Sra. Pérez-Alonso, cuyos principales méritos son:

- publicar unos libros que no me gustan nada, y algo sobre literatura entenderé, porque otra cosa no, pero mi biblioteca tiene algún que otro millar de libros y, contra la costumbre de otros, no me hice con ellos para decorar mi casa, sino que los he leído.

- haber presentado una querella criminal contra Don José María Aznar López en la que se refería a él como "D. José María Aznar, cuyo segundo apellido y resto de datos personales se desconocen"... En una señora que dice saber Derecho, que no sepa que el segundo apellido del Sr. Aznar aparecía a la sazón casi diariamente en el BOE me parece imposible de disculpar. Si lo sabía y no se tomó la molestia de mirarlo, me parece un síntoma de la capacidad de trabajo como abogada de la Sra. Pérez-Alonso cuyo segundo apellido no me acuerdo y no me apetece buscar... En cuanto a su domicilio, pues mire, si no sabe dónde está La Moncloa, vamos aviaos, oiga. La querella , naturalmente, fue archivada, por su deficientísima motivación (hasta un lego en Derecho como el que suscribe la hubiera fundamentado mejor).

- haberse presentado como precandidata a Secretaria General del PSOE en los convulsos tiempos en que se permitió por unos días presentarse a cualquier afiliad@. Creo que no es necesario recordar que cuando hicieron falta avales, no estuvo ni siquiera entre los cuatro candidatos definitivos

- haber salido a medios de comunicación de línea editorial marcadamente derechista criticando acerbamente al Partido ( el mío ) en el que militaba por haber tomado una decisión que no le gustaba según un proceso democrático ajustado a los Estatutos del Partido. Ahora bien, algunas sólo aceptan la democracia cuando ganan, otros aceptamos el juego democrático de las mayorías y las minorías, como este menda, que apoyó en su día a Ana Bernardo como candidata a alcaldesa de Oviedo, trabajó durísimamente en recabar avales para su candidatura puerta a puerta de centenares de compañeros y compañeras, ganó las primarias Leopoldo Tolivar, y cinco minutos después de proclamado el resultado, este cura le dijo a quien se lo tenía que decir: desde hace cinco minutos, Tolivar es mi candidato, pues es el del Partido, que lo ha elegido conforme a estatutos. ¿ Qué debo hacer para trabajar para que sea el próximo alcalde de Oviedo ? Le transmitís por favor al Candidato que estoy a su disposición y a la del Secretario General de la AMSO para lo que estime menester, como siempre he estado desde que me afilié al PSOE el día que cumplí 18 años.... Claro que el concepto de democracia, y conciliar la libertad de expresión con aceptar voluntariamente el resultado de las mayorías en un partido en el que a nadie se obliga a estar, y donde si no se quiere cumplir el apartado de "Derechos Y DEBERES de l@s militantes" se puede ser simpatizante y aquí paz y después gloria, comprendo que excede de la capacidad de comprensión de algunas.

Yo las únicas dietas que he cobrado en mi vida de un Partido han sido las que me asignaron en algunas ocasiones para representar a Juventudes Socialistas de Asturias en reuniones en Madrid, dietas que no solían cubrir ni el comer un plato del día en la capital, y de las cuales aportaba la diferencia de mi bolsillo, o , mejor dicho, del de mi familia, pues a la sazón yo aún no trabajaba, pues no empecé a trabajar hasta los 21 años, y representé a JSA en Madrid ya con 15. De una Administración Pública, las que me correspondían según Derecho en mi puesto de trabajo como Personal Laboral de la Consejería de Cultura por concurso-oposición ganado con el número uno ( no lo suelo decir, pero a veces a uno la indignación hace que le pida el cuerpo hasta chulearse ) siendo Presidente del Principado Don Sergio Marqués Fernández y Presidente del Tribunal un excelente Jefe de Servicio, por Delegación del Consejero, cuyas simpatías por el Partido Popular siempre ha hecho públicas y notorias, a pesar de lo cual nos profesamos una gran estima y un inmenso respeto mutuos.

Este que aquí escribe, ha trabajado mucho por Oviedo, se habrá equivocado mucho, por supuesto, pero sólo se equivoca quien trabaja, quien nada hace, jamás yerra. Y siempre gratis, y , con frecuencia, tras salir cansado de trabajar, y/o robándole horas al siempre necesario para mi, en ocasiones, precaria salud, descanso. Y le aseguro a la Sra. Dª Susana Pérez Alonso,de cuyo segundo apellido no quiero acordarme ni me acuerdo, que ni quiero dietas, ni quiero medallas, sólo hago lo que mis convicciones éticas y el placer que seguirlas me causa dictan.

Y mire, Doña Susana... ¿ sabe qué le digo ? Que ya le he dedicado más tiempo del que se merece. Le agradeceré mucho si desea tomarse la molestia de llevarme una silla a la entrega de su medalla, especialmente dado lo baldío que resultará su esfuerzo, pues no voy a acudir.

Que tenga usted mucha salud.